Iniciaron las tradicionales posadas
Ayer iniciaron las tradicionales posadas que se celebran dentro de las festividades de la Navidad y que en México se viven desde los tiempos de la época de la Colonia. Así, en la región Tula-Tepeji, los barrios, comunidades y colonias comenzaron el peregrinar de María y José en un ambiente de alegría y unión familiar.
Esta fiesta desde finales del siglo XVIII ha formado parte de la cultura popular que reúne a las familias en los patios de los templos, en calles y en los traspatios de algunos domicilios que son recorridos con canticos religiosos y que dan pie a esta colorida festividad que inició ayer y concluye el día 24 con el Nacimiento de Jesús.
Las posadas nos recuerdan cuando María y José salen de Nazaret para llegar a Belén donde buscaron un lugar para alojarse y esperar el nacimiento del hijo de Dios que llego para salvar a la humanidad.
En esta fiesta, el pueblo y los pastorcitos que fueron guiados por el arcángel San Gabriel, recorren el camino pidiendo posada por algunas calles, a manera de recordar ese camino que tuvieron que pasar María y José.
También y eliminando la tentación de los siete pecados capitales que tuvieron los pastorcitos, se rompen las piñatas, en las que participan pequeños y grandes.
El ponche, los tamales y los dulces no pueden faltar en esta fiesta que une pueblos y comunidades que se alegran al recordar la llegada de Jesucristo.
Las posadas también son motivo para que después del peregrinar los asistentes reciban comida tradicional, como el ponche o los tamales, y además generalmente se les entregan a los niños los aguinaldos, con galletas y dulces, y que antes generalmente llevaban frutas como cañas, tejocotes o mandarinas, entre otros.