No se dan abasto las funerarias por el Covid
* Familiares de fallecidos tienen que esperar casi una semana para que incineren los cuerpos de las víctimas
Ante la alta mortalidad que en la semana anterior tuvo el Covid-19 en Tula y en esta región en general, familiares de los fallecidos tienen que esperar hasta cuatro o cinco días para que haya disponibilidad en el servicio de cremación en las dos funerarias de la demarcación con servicio de incineración de cuerpos, reveló Alfonso Flores Galván, representante regional de la Comisión para la Protección de Riesgos Sanitarios (Copriseh).
Durante una reunión informativa, el funcionario dijo que el escenario de la pandemia ha entrado a una fase crítica, ya que el número de contagios y muertes provocadas por el Covid-19 van en aumento día con día, “tanto así que en los hospitales con capacidad para tratar al coronavirus ya no tienen lugar”.
“Tenemos el agua hasta el cuello, sino es que arriba de la boca y no aguantaremos mucho más; los servicios de salud están a punto de colapsar y en los hospitales ya no caben los enfermos”.
Reveló que el mayor número de defunciones que se ha registrado en Tula ocurrió el martes 19 del presente, en que 6 tulenses perdieron la vida.
Otro dato alarmante, pormenorizó, es que los difuntos que hubo el martes anterior, fueron personas jóvenes, de entre 25 y 29 años, lo que quiere decir que la mortalidad empieza a disminuir en cuestión de rango de edad… antes los jóvenes se sentían a salvo, ya que sólo perecían personas mayores de 40 años, “ahora todo está cambiando”.
El aumento de defunciones, señaló, ha provocado que las funerarias con servicio de cremación tengan sobrecarga de trabajo y las familias de los fallecidos tienen que esperar casi una semana para poder incinerar a sus muertos.
Indicó que en las funerarias El Ángel y Tepeyac, únicas con servicio de incineración, en las últimas semanas se han visto con largas filas de espera para acceder al servicio.
