Por mensaje, así engancharon a «Cheche», joven que apareció en video después de 4 meses
En la grabación el chico asegura que fue contactado mediante un mensaje para trabajar como «punto» en Aldama
Josué Guerrero Espino, joven de 17 años, que desapareció el 30 de abril pasado, fue enganchado por un grupo del crimen organizado mediante un mensaje. Tras meses de búsqueda el adolescente reapareció en un video, luego del cual su familia ha redoblado los esfuerzos por hallarlo.
«Cheche», como le llama su familia, fue visto por última vez en Ciudad Aldama, Chihuahua. Dicha información también fue confirmada por el chico, a través del video, en el que se le ve con los ojos vendados y las manos atadas, además de rapado del cabello, en una situación en la que al parecer fue secuestrado.
En la grabación el chico asegura que fue contactado mediante un mensaje para trabajar como «punto» en Aldama. En el doloroso video, «Cheche» explica que fue levantado sólo dos días después de haber sido reclutado para dicha labor. Quienes al parecer habrían levantado a Josué Guerrero Espino son sujetos identificados como «Roster» y «Challelo», presuntamente de la facción de «Los Mayos» del Cártel de Sinaloa.
Tras la aparición del video, Magaly Espino, madre de «Cheche» lanzó un video para reforzar la búsqueda de su hijo. «Estamos desesperados por encontrar a mi niño, estamos en búsqueda de él», dice la mujer en el video, en el que carga la ficha de localización que ella realizó.
Por videojuegos y con ofertas falsas de trabajo, así engancha el crimen a jóvenes como a «Cheche»
Como en el caso de «Cheche», otros jóvenes son reclutados por el crimen organizado mediante los siguientes mecanismos, de acuerdo con la organización Reinserta:
Por videojuegos y redes sociales. La edad promedio en que los jóvenes son enganchados es entre los 12 y 15 años. El contacto se ha dado incluso a través de videojuegos y redes sociales, por lo que se pide a los padres estar atento ante cambios de comportamiento de sus hijos, así como del entretenimiento que consumen.
Ofertas falsas de trabajo. Generalmente, los grupos del crimen organizado ofrecen trabajos con muy buena paga. Sin embargo, las víctimas son obligadas a realizar labores dentro de los cárteles. Este modus operandi fue exhibido desde hace unos años, pero tras el hallazgo del rancho Izaguirre, en Jalisco, se detalló aún más.