Poeta y asesino serial que se comía a sus víctimas: Así fue la vida de «El caníbal de la Guerrero»
Conoce la historia del poeta seductor que asesinó a varias mujeres y cometió actos de canibalismo, un asesino serial que estremeció a la sociedad mexicana
Una escena macabra aguardaba a los policías aquel lunes 8 de octubre de 2007, quienes recibieron un reporte para apoyar en la búsqueda de una mujer desaparecida de nombre Alejandra Galeana Garavito, una joven trabajadora de una farmacia ubicada en la colonia Guerrero quien no regresó a casa y su familia pidió apoyo para interceptar al novio de quien sospechaban.
La pareja de Alejandra, era José Luis Calva Zepeda, un hombre de 37 años quien habitaba aquel departamento con el número 17 ubicado en la calle Mosqueta 198 en la colonia Guerrero de la Ciudad de México.
Los policías lograron entrar al departamento y esto fue lo que encontraron: oscuridad total, tres velas dejaban ver algunos objetos sobre la mesa, un olor nauseabundo e insoportable enmarcaba el ambiente por demás tétrico. Un plato sobre la mesa dejaba entrever lo que parecía ser carne y dos limones, una cubeta llena de zapatos de mujeres. Un sartén en la cocina con restos de carne sobre éste. Al abrir el refrigerador encontraron partes de cuerpos humanos en su interior. En la habitación había un ropero que escondía el torso humano de una persona y de lo que parecía ser de una mujer; libros de brujería por doquier, un póster del personaje de Anthony Hopkins como Hannibal Lecter; poemas, textos, películas de alto contenido sexual y violencia.
Un panorama revelaba el por qué momentos antes José Luis Calva había intentado huir.
Calva Zepeda, el joven poeta fue detenido por las autoridades el 8 de octubre de 2007 y fue acusado del triple homicidio y canibalismo a pesar de que se le comprobaron 4 asesinatos. Fue llamado «El Caníbal de la Guerrero».
Un estudio psiquiátrico, mostró que Calva Zepeda no era apto para cumplir su condena en prisión preventiva convencional y recomendaron que fuera ingresado a un área aislada con cuidados especiales y bajo prescripción médica por síntomas maníacos depresivos y tendencias suicidas.
El juez que llevó el caso, le dictó auto de formal prisión y Calva Zepeda ingresó al reclusorio Oriente el 24 de octubre de 2007 por el asesinato de Alejandra Galeana, delito por el cual obtendría una condena de 50 años por homicidio.
Desafortunadamente, dicha sentencia nunca se cumplió porque José Luis se suicidó el 11 de diciembre del mismo año.