Bebé Tadeo fue escondido por 24 horas en la cárcel de San Miguel antes de tirarlo
Las investigaciones en contra de un interno y quien al parecer ordenó el ingreso del bebé
El bebé Tadeo, quien previamente fue exhumado ilegalmente de un panteón de la Ciudad de México, estuvo escondido en las celdas de la cárcel de San Miguel en Puebla, previo a ser tirado en un contenedor de basura.
Así lo reveló el titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Gilberto Higuera Bernal, en una reunión con los diputados locales del Congreso de Puebla, donde reiteró que este caso se encuentra cerrado por parte del organismo que lideran
Sin embargo, destacó que las investigaciones en contra de un interno y quien al parecer ordenó el ingreso del bebé, continúan por parte de la FGE, luego de que es señalado por cometer otro tipo de delitos de cuando estaba en libertad.
Y es que refirió, que el menor antes de ser abandonado en un contenedor de basura, estuvo un día y una noche en las celdas de esta prisión ubicada al oriente de la capital poblana.
“Logramos establecer que esa persona de sexo femenino, logró introducir el cuerpo del bebé en complicidad de custodios, también establecimos que después de tenerlo un día, una noche, al día siguiente lo depositaron en ese contenedor, también identificados a la persona que lo depositó”.
No hay que pasar por alto, que el 3 de febrero, que la FGE reveló que dos mujeres fueron detenidas, por ser las presuntas responsables de ingresar al bebé Tadeo en el penal de San Miguel, donde luego fue abandonado en un contenedor de basura.
Mediante un comunicado de prensa, se explicó que Jessica «N» y Nadia Carolina «N», son las 2 mujeres que fueron detenidas, además de revelar que dos internos Antonio «N» y Sergio «N», se les imputaron delitos por Violación a la Ley General de Salud, Infracciones a Leyes y Reglamentos sobre Inhumaciones y Exhumaciones y Asociación Delictuosa, además de Encubrimiento, donde también se vincula al excustodio Gerardo «N».
También se detalló que Nadia Carolina «N» lo habría llevado al Centro Penitenciario y se le ubica como visitante frecuente de Antonio «N», este último quien ordenó el ingreso del menor.