AMLO descarta ataques contra la prensa: «No mandamos a asesinar a nadie»
El presidente de México aseguró que sus críticas se han hecho contra la gente que maneja los medios de comunicación
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que no tiene nada en contra de los periodistas de México y que respeta su profesión; sin embargo, dijo estar en contra de los empresarios que protegen a las clases políticas minoritarias en el país.
«No mandamos a asesinar a nadie; no damos las órdenes para que desaparezcan las personas, eso ya cambió», dijo durante la conferencia matutina de este martes en Palacio Nacional.
Destacó que algunos de los dueños de estas fuentes de información tienden a buscar que se perpetúe el dominio político y económico de las personas que están en el poder. Descartó además que el gobierno tuviera relación con la muerte de periodistas en el país.
«La mayoría de los periodistas mujeres y hombres es gente buena», dijo.
Está en contra de los privilegios
Aseguró que los dueños de los conglomerados de comunicación están molestos con su administración por ser parte de las noticias, aunque destacó que en la nación sigue habiendo reporteros íntegros.
«La mayor parte de los medios pertenece al grupo de poder económico y político que ha dominado y ha causado mucho daño al país», dijo.
Dijo que los reporteros no tienen jurisdicción para manejar los discuros políticos que son ordenados por los diarios y noticieros que hay en el país. Añadió que siente respeto por los comunicadores, pero no con defender el régimen de corrupción.
«Lo que queremos es que haya libertad de prensa, que no negocien con la libertad de prensa unos cuantos»
Indicó que la libertad de comunicar por parte de los reporteros queda coartada por las empresas para las cuales trabajan y que no les permiten dar a conocer los datos como lo tienen previsto. Además, recordó una frase de Noam Chomsky:
«El propósito de los medios masivos… no es tanto informar y reportar loq ue sucede, sino bien dar forma a la opinión pública de acuerdo a las agendas del poder corporativo dominante».