En La Salle, una violación, encubrimiento, humillaciones, el calvario de Michelle por exigir justicia
El 23 septiembre 2019, Michelle fue víctima de violación por parte de Iñaki “N”, sin embargo, su proceso se extendió 3 años por la pandemia y la negligencia de la preparatoria
La falta de empatía por parte de las instituciones hacia las víctimas de violencia de género, acoso o abuso sexual, se encuentra sumamente presente, a pesar de que existan comités de ética o protocolos especiales para esas problemáticas.
Además, la pandemia no ayudó en nada a agilizar las denuncias en este aspecto, esta situación le pasó a Michelle, quien fue víctima de violación por parte de Iñaki “N”, en 2020, cuando ella tenía 17 años, quien fue entrevistada por EL UNIVERSAL.
Actualmente, Michelle tiene 21 años de edad, su denuncia ante la fiscalía capitalina pasó aproximadamente 3 años en espera, sin embargo, la denuncia ante la preparatoria La Salle en el plantel Condesa continúa sin ser atendida y al parecer no es la única persona que fue violentada por Iñaki “N”.
Su caso fue pausado 3 años por la pandemia, la falta de seguimiento de la escuela y el procedimiento de la fiscalía. Por lo que el proceso fue agotador, física y psicológicamente para ella y su familia.
Tras la falta de respuesta por parte del Comité de Ética de La Salle, Michelle decidió exponer su caso en redes sociales, por lo que realizó un video explicando la situación y la falta de apoyo por parte de la institución.
En su clip publicado por Instagram, describe la falta de empatía, la presión y la falta de seguimiento ante su denuncia, EL UNIVERSAL, entrevistó a Michelle para conocer su historia.
Consentimiento por presión y violencia agravada
El 23 septiembre 2019, Michelle fue víctima de violación por parte de Iñaki “N”, quien en ese entonces era un amigo cercano. La joven fue a la casa de Iñaki “N”, para hablar de un problema personal.
Michelle relató que en ese momento se encontraba sola con Iñaki en la casa, por lo que él le insistió en repetidas ocasiones para tener relaciones sexuales, tras la insistencia y la presión, la joven accedió.
Sin embargo, durante el acto ella le pidió a Iñaki que se detuviera, el joven continuó con la relación sexual hasta provocarle un sangrado, además de que fue azotada en dos ocasiones, Michelle se encontraba completamente en shock tras aquella situación.
Exhibe en tendedero de La Salle a su agresor
Michelle, de 21 años, relató que en un principio no sabía qué era una violación, por lo que “decidió quedarse callada”, además de sentir que “era una situación que merecía, por ser una víctima”, hasta que tuvo una clase de derecho en donde explicaron los tipos de violencia.
“Una amiga me mandó mensaje y me dijo que debería poner mi cartel allí, que me apoyaba, entonces ese mensaje me impulsó y no sé por qué, pero desde ese mensaje no he parado, desde que alguien me reconoció lo que había pasado, me impulsó hasta donde estoy ahorita”, comentó.
Aproximadamente seis meses después de la agresión en la escuela preparatoria, algunas activistas realizaron el tendedero fuera del plantel escolar, en donde Michelle con el apoyo de algunos amigos, decidió contar su historia. Su agresor decidió tomarse una fotografía y subirla a sus redes sociales, normalizando sus acciones y burlándose de su acusación, llegando a los salones gritando “ya llegó el violador”.
E incluso una persona que era amigo en común de ambos resultó lesionada, por subir una foto del cartel apoyando a Michelle, por lo que Iñaki junto con su grupo de amigos golpearon a esta persona, y las autoridades del centro educativo no hicieron nada al respecto.
Denuncia ante el Comité de Ética
Tras exponer el caso en los tendederos, Michelle, con 17 años de edad, acudió a las autoridades del plantel en marzo del 2020 para interponer una denuncia a Iñaki de la misma edad, sin embargo, en ese momento inició la pandemia del covid-19.
Michelle comentó que desde el momento que presentó la denuncia sintió cierta hostilidad y presión por parte de la abogada Aide y la directora Sofía del Comité de Ética, por lo que tuvo un ataque de pánico.
El protocolo de La Salle ante estas denuncias son tomar el testimonio de la víctima, investigación, testimonio del agresor y una resolución. Sin embargo, el comité de Ética decidió poner pausa a la denuncia hasta que regresaran a las actividades, por lo que se comunicaron con ella por correo electrónico.
Durante el intercambio de correos, la escuela le dio un plazo de una semana para que Michelle diera una respuesta si iba a meter una denuncia a la fiscalía capitalina y continuar el proceso para notificar a los padres y al agresor, a lo que Michelle les pidió más tiempo para pensar la situación.
Denuncia ante la fiscalía CDMX y proceso legal
En abril del 2021, la joven interpuso la denuncia por violación contra Iñaki “N”, y para continuar el proceso se tuvieron que realizar dictámenes psicológicos y médicos, tanto particulares como emitidos por el Ministerio Público, por lo cual el proceso legal se retrasó 10 meses más, por la pandemia.
En el dictamen psicológico se determinó que Michelle había sufrido violencia de género, psicológica y sexual, además que durante el momento de la agresión se encontraba en una etapa vulnerable.
Por lo que tuvo que emitir su declaración en repetidas ocasiones en el búnker, además de que un año después fue realizado el dictamen médico, en donde se observó que tenía un desgarre de tiempo atrás. Por lo que procedió la demanda, y la notificación de la fiscalía CDMX a los padres de Inaki “N”, quien en ese momento ya era mayor de edad.
Tras la notificación, Iñaki «N», encontró diferentes maneras para evitar acudir a los citatorios de la fiscalía local, entre ellos pruebas falsas de covid y salmonela, además de un reporte médico de su madre. La dependencia solicitó los registros de asistencia y los torniquetes a la escuela, lo que determinó que el agresor estaba mintiendo para no asistir a la audiencia.
El 6 de junio de 2023, Iñaki “N”, fue vinculado a proceso por el delito de violación, días más tarde pidieron una suspensión del proceso en donde, el joven de ahora 21 años, reconoció el delito y ofreció una disculpa pública “por los hechos que se le acusan”. Sin embargo, Iñaki fue sentenciado como menor de edad, por lo que en la resolución no tuvo privación de la libertad. La juez impuso una sentencia de un programa de orientación por 8 meses, estudiar, trabajar y la reparación del daño.
Comité de Ética de La Salle plantel Condesa
Después de todo el proceso penal, Michelle, decidió acudir nuevamente al Comité de Ética de La Salle, puesto que Inaki “N” continúa estudiando en el plantel en la carrera en Ingeniería en Mecatrónica. Michelle decidió cambiar de escuela, para no tener que convivir con su agresor.
Dicho comité ha dado largas al caso de Michelle, no le responden las llamadas y tardan en responderles los correos argumentando que “no podían hacer nada sin la resolución de la fiscalía”, a pesar de llevar una vinculación a proceso, la institución no ha avanzado en su protocolo tras la denuncia.
Michelle relata que existen otros dos casos en donde Iñaki violentó a dos alumnas del plantel, además de que la comitiva feminista ha expuesto su falta de empatía y de seguimiento a las denuncias, además de minimizar los hechos y tratar a las víctimas como si fuera su culpa. Ante la falta de respuesta, Michelle y otras alumnas realizaron una marcha y entrega de carteles para dar a conocer el caso, sin embargo, la institución continúa sin dar respuesta.
La joven de 21 años explicó que tras la sanción de la juez, el comité de ética, presuntamente se apegó a lo que se dictaminó, y envió a Iñaki a otro curso con perspectiva de género, puesto que al correrlo entrarían en desacato. Hasta el momento Iñaki “N” continúa asistiendo a clases normales tras su proceso legal.