Hallan cuerpos carbonizados de dos trabajadores de Pemex tras incendio en Ixhuatlán
Han sido encontrados, carbonizados, dos de los cinco obreros desaparecidos durante la explosión del Centro de Almacenamiento Estratégico de Tuzandetepétl.
Han sido encontrados, carbonizados, dos de los cinco obreros desaparecidos durante la explosión del Centro de Almacenamiento Estratégico de Tuzandetepétl, en el municipio de Ixhuatlán de Madero, luego de la explosión e incendio en una de las cavernas donde resguardaban barriles de crudo.
Los obreros sobrevivientes han denunciado que Petróleos Mexicanos retiró a la compañía que monitoreaba las alarmas de gases H2S porque se habían acabado los contratos.
“Ellos estaban trabajando así, a la experiencia, pero el gas ya se había expandido por toda el área, por toda la pera, pero en el área de máquinas se ocasionó una chispa y esa fue la primera explosión que hubo”, recordó uno de los trabajadores.
Dijo que como ya estaba saturado de gas, la primera explosión llegó al contrapozo y donde se registró el primer estallido y comenzó el incendio en la caverna, en cuestión de segundos comenzó el incendio y colapsó en menos de 10 minutos la torre de perforación.
“Lamentablemente compañeros con los que trabajé y que estuve con ellos en ese pozo perdieron la vida”, recordó.
Hasta el momento, sólo el obrero Carlos Ascensión, uno de los reportados como desaparecido, fue declarado identificado; hay otro cadáver que aún es estudiado por los expertos forenses para determinar su identidad a través de estudios de ADN.
Otras víctimas que fueron reportadas como desaparecidas desde la tarde del jueves son Gabriel Obed Canseco Pacheco, originario de Agua Dulce; José Dimas Pérez Solís y José Alfonso de la Cruz, quienes eran originario de Villahermosa, Tabasco y Hugo Cruz Acosta, del municipio de Nanchital.
Dos de los trabajadores del CAE Tuzandépetl que debían estar el jueves laborando, fueron comisionados a un curso de tres días y entraron dos suplentes, quienes presumiblemente perdieron la vida, pero aún son reportados como desaparecidos.
“Estamos conscientes que los consumió el fuego y es duro decirlo. Estamos consternados. Nosotros estamos a 300 metros y me dio la orden el perforador de mandar a la gente a limpiar el área, pero todavía se encontraban en el comedor, yo me encontraba afuera y di la alarma de la primera detonación en el pozo, del equipo y avisé a mi jefe de inmediato y temblaba la tierra, porque por abajo están las líneas, nosotros estábamos cerca de las líneas y todo fue un caos, alarmante”.
Los demás trabajadores comenzaron a correr, desesperados, porque el fuego ya había invadido al menos 500 metros a la redonda y no había punto de salida, porque es donde estaban almacenados un millón de barriles por caverna y sólo se quemó una.
“Los de la estación Tuzandépetl se pusieron la camisa de cerrar las válvulas, porque también no aguantaban el calor neumáticamente, si no, hubiera sido más duro esto”, reconoció.
Por su parte, Emmanuel B. un joven obrero de 23 años, que sobrevivió al accidente, dijo que inició mal su primer trabajo.
“La verdad siento que estoy saladísimo, porque apenas me acabo de recibir y llevo dos meses trabajando aquí. Es mi primer trabajo y se me hace una catástrofe lo que pasó aquí”, dijo.
Un día después de la tragedia, siguen en la búsqueda de restos de los trabajadores que quedaron atrapados en la caverna, donde se consumieron un aproximado de un millón de barriles, de acuerdo con el testimonio de obreros.