La Planta Tratadora de Aguas Negras (PTAR) es una «bomba de tiempo» que puede provocar una explosión de incalculables consecuencias y sobre todo, muerte

La Planta Tratadora de Aguas Negras (PTAR) es una «bomba de tiempo» que puede provocar una explosión de incalculables consecuencias y sobre todo, muerte

* La macro-inundación del río Tula del año pasado provocó que el río se ensanchara a más del triple y el agua «carcomió» la tierra, por lo que ahora están a punto de caerse varias torres de energía eléctrica de la CFE. * Además, quedó al descubierto un ducto de Pemex que están ordeñando huachicoleros

Por Gabriela Tovar González

En una «bomba de tiempo», se ha convertido la Planta Tratadora de Aguas Negras (PTAR) que se ubica en Atotonilco de Tula, debido a la macro-inundación que ocurrió en septiembre del año pasado por las aguas provenientes de la CDMX y el Valle de México. El exceso de agua aumentó el cauce del río Tula a más del triple de su capacidad y esto provocó el deslave de tierra de las torres de energía eléctrica que abastecen a la planta, las cuales están a punto de caerse y provocar una reacción en cadena que generaría una explosión y severos daños en toda esta zona. A ello se suma un ducto de Pemex que las aguas dejaron al descubierto y que ya es ordeñado por huachicoleros.

      En el lugar se calcula que hay alrededor de 25 torres de energía eléctrica de la CFE que abastecen a la planta tratadora de aguas negras, además de unos 30 tanques digestores de gas, cada uno de unos 600 mil litros, producto que se obtiene de las aguas negras que llegan provenientes del túnel emisor oriente que se construyó para desfogar millones de litros de aguas residuales de la CDMX y el Valle de México.

GRAVE ENSANCHAMIENTO DEL RÍO TULA

      En entrevista con LA REGION, el delegado regional de la Unión Nacional de Transportistas Campesinos (UNTRAC) y quien ha sido comisariado ejidal de Conejos, en el municipio de Atotonilco, Javier Tovar Angeles, donde está asentada la PTAR, explicó que con la gran cantidad de agua negra que llegó el 6 de septiembre de 2021 y que provocó severas inundaciones en diferentes partes del estado de Hidalgo, aumentó extraordinariamente el tamaño del río Tula en esa zona.

     Indicó que el río que pasa por la planta tratadora tenía unos 50 metros de ancho cuando empezaron a echar agua negra en los años 70´s y poco a poco pasó a los 200 metros, pero con la inundación llegó a más de 450 metros de ancho.

      «Esto ha provocado que la distancia que había entre el río y las torres de energía eléctrica haya disminuido peligrosamente, porque antes eran varios metros de distancia y ahora hay tres torres que tienen apenas un metro con 20 centímetros de distancia del río».

      En las imágenes que muestra el entrevistado se ve claramente cómo cada torre tiene una zapata (estructura de construcción) y luego viene la base de la torre, pero peligrosamente el agua del río ya deslavó la tierra y sigue carcomiendo literalmente la tierra.

      Hay tres torres que son peligrosísimas -afirma- y la Conagua no ha hecho nada para prevenir una posible explosión que ocurriría si las torres llegan a caerse y hacen una reacción en cadena en el lugar.

OCURRIRÍA UNA REACCIÓN EN CADENA

      El profesor Enrique Villa Cortés, Delegado estatal de la Unión Nacional de Transportistas Campesinos (UNTRAC) quien se ha dedicado a verificar esta severa problemática, señaló que la Conagua calculó mal la distancia de la torres con el río, o no ha hecho nada para evitar que el río siga ensanchándose sin que pongan una solución.

      Por ello, agregó, hacemos un llamado urgente al Director General de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett Díaz, para que tome cartas en el asunto porque si se caen las torres ardería todo, se haría una reacción en cadena y se provocaría una explosión peor que la de San Juanico por los tanques de gas que hay en la planta tratadora.

     Indicó que a un kilómetro de la PTAR  se encuentran dos comunidades que son San Antonio y San José Acoculco donde viven miles de habitantes, pero además el efecto de la explosión podría llegar hasta Ciudad Cooperativa Cruz Azul e incluso hasta la ciudad de Tula.

       «Por ello, invitamos a las autoridades involucradas a que vengan ahora a prevenir esta posible explosión y que no lleguen después a un sepelio», agregó.

HUACHICOLEROS ORDEÑAN DUCTO DE PEMEX

      Aunado al problema de las torres de energía eléctrica, los entrevistados dieron a conocer otro grave riesgo que hay en la zona, y es que por los terrenos de la planta tratadora de aguas residuales del Valle de México atraviesa un ducto de Pemex y también, debido a que se ensanchó el rio Tula, el tubo ya quedó al descubierto.

      El problema es que la gente de Pemex fue al lugar y sólo lo cubrió con una malla ciclónica dejándolo al descubierto, y como en la zona existen grupos de huachicoleros, pues ya han llegado a «ordeñarlo».

       El profesor Villa Cortés muestra fotografías donde se ve claramente como el tubo está lleno de agua por ambos lados y hay varios cortes en la malla ciclónica e, incluso, en una parte ya está descubierto y los delincuentes sólo lo cubrieron con piedras.

      «Es muy claro que estos sujetos llegan por las noches a sacar el hidrocarburo del ducto», aseguró.

      Por ello, indicó que esta situación se suma al grave riesgo que hay en la zona, porque si se da una fuga de hidrocarburo se puede provocar una chispa que ardería el agua negra que lleva el río Tula y el desastre sería enorme.

      En este caso, los entrevistados también manifestaron que Pemex no ha hecho nada por arreglar el ducto y que es increíble que continuamente pasan por el lugar los vigilantes de la petrolera y no hacen nada.

LLAMADO A QUE LA CONAPRED ACUDA

       Ante estas dos situaciones de grave riesgo en la zona de la Planta Tratadora de Aguas Residuales del Valle de México, Javier Tovar Angeles y Enrique Villa Cortés, quienes se han dedicado a investigar esta problemática, hicieron un llamado urgente a la Comisión Nacional de Prevención de Desastres (CONAPRED) para que acudan al lugar y verifiquen lo que ahí ocurre.

      «Sabemos que la CONAPRED está presidida por el Secretario de Gobernación e intervienen diversas secretarías, en este caso también la CFE, Protección Civil y la Conagua, entre otras, para que atiendan esta situación que es de grave riesgo para toda la zona del sur de Hidalgo».

      Ya sufrimos una severa inundación que dañó el patrimonio de muchas familias en en esta región -indicaron-  y ahora no queremos pasar por una explosión que además acabaría con muchas vidas.

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