«Mamá, ya estamos saliendo”: último mensaje de un niño de 13 años que murió en caja de un tráiler en Texas
El adolescente viajaba con su primo, buscaban dejar atrás la pobreza; ambos fallecieron dentro del tráiler
Tras darse a conocer el hallazgo de un tráiler, en Texas, donde viajaban decenas de migrantes muertos, familiares de las víctimas han externado su dolor en redes sociales. Tal es el caso de una familia originaria de Guatemala, quienes lloran la muerte de dos familiares.
Los jóvenes, identificados como Wilmer y Melvin, de tan solo 13 años de edad, eran primos y viajaban juntos hacia Estados Unidos con el objetivo de dejar atrás la pobreza y ayudar a sus familiares a tener una vida mejor.
«Se subieron todas las cosas. Papá, voy a ir a luchar. Por la pobreza se fueron”, detalló, entre lágrimas, Manuel Tulul, padre de Wilmer. También, comentó que el adolescente trabajaba limpiando milpas y había tomado la decisión de migrar para apoyar a la familia y ayudar a dar de comer a sus tres hermanos.
De acuerdo con el testimonio de sus familiares, Wilmer contactó con su madre, por última vez, horas antes de subir al tráiler, donde posteriormente perdería la vida. “Mamá, ya estamos saliendo”, se escucha en el último mensaje de voz que el adolescente envió.
Horas después, el lunes 27 de junio, las autoridades estadounidenses reportaron el hallazgo de 46 personas muertas en el interior de un tráiler localizado en San Antonio, Texas. Wilmer y su primo Melvin, eran parte de los migrantes que perdieron la vida dentro del vehículo, donde otras 16 personas resultaron heridas.
Los primos se dirigían a Houston, Texas, donde otros familiares los esperaban. Sus parientes los habían ayudado a cubrir el pago y la contratación de un “coyote” para llegar a Estados Unidos, indicó la madre a medios de comunicación.
Luego de darse a conocer la trágica noticia, los familiares de los jóvenes identificaron que ambos adolescentes viajaban a bordo del tráiler.
Finalmente, los familiares de las víctimas piden apoyo a las autoridades de su país, ya que no cuentan con los recursos necesarios para repatriar los cuerpos y poder enterrarlos en su comunidad.