Mayoría de boyas que Texas puso en la frontera están en México, determina la Comisión Internacional de Límites y Aguas
Basa su afirmación en un estudio topográfico de la sección del Río Bravo cercana a Eagle Pass
La comisión internacional que supervisa el Río Bravo ha determinado que casi todas las boyas instaladas en el río por orden del gobernador Greg Abbott están flotando en el lado mexicano de la frontera internacional, informó hoy el diario Caller Times.
La conclusión de la Comisión Internacional de Límites y Aguas, responsable de los tratados fronterizos y de aguas entre Estados Unidos y México, fue presentada el martes por el Departamento de Justicia de Estados Unidos ante el tribunal federal que supervisa la demanda contra Abbott y el estado de Texas y reclama el retiro de las boyas.
«Comparando los resultados del levantamiento con la Línea Fronteriza Internacional (IBL, por sus siglas en inglés) entre Estados Unidos y México, el levantamiento acordado por los comisionados (estadounidenses y mexicanos) refleja que la cadena de boyas cruza la IBL, y que la mayor parte de la barrera flotante… se encuentra dentro del territorio de México», señala el documento de la comisión presentado en el tribunal.
Según el documento judicial, representantes de la IBWC de ambas naciones realizaron a finales del mes pasado un estudio topográfico de la sección del Río Bravo cercana a Eagle Pass donde la cadena de boyas de poco más de 300 metros ha estado flotando desde mediados de julio. Sólo 33 metros de la cadena se encuentran en aguas estadounidenses.
El Departamento de Justicia indicó que tomará en cuenta estos datos, aunque el documento en sí no solicita medidas específicas.
Abogados de Greg Abbott y de Texas piden mantener boyas en el Río Bravo
Los abogados de Abbott y de Texas pidieron al juez David Alan Ezra que rechace la petición del Departamento de Justicia de retirar las boyas del río mientras se resuelve el caso. Ezra fijó para el 22 de agosto una audiencia en Austin sobre la petición del gobierno federal para el retiro de las boyas, indicó el Caller.
El gobierno de México también interpuso una queja por la colocación de las boyas. El presidente Andrés Manuel López Obrador calificó a Abbott de «inhumano» por haberlas colocado, sobre todo después del hallazgo de dos cuerpos, aunque el gobierno de Texas alega que no fueron las boyas las que les causaron la muerte.
Por su parte, diversos congresistas demócratas han señalado que estas boyas están equipadas con filosas tiras metálicas a modo de sierras, las cuales giran con el movimiento de la barrera sobre el agua.