Seguridad Nacional
Desafortunadas las declaraciones que el embajador estadounidense Ken Salazar expresó durante una conferencia de prensa el pasado 13 de noviembre sobre el tema de seguridad nacional en México. Ken Salazar afirmó que la estrategia de “abrazos no balazos” del ex presidente Andrés Manuel López Obrador falló.
Además recomendó a la presidenta de México Claudia Sheinbaum Pardo renunciar a la austeridad republicana (de su antecesor) e invertir los recursos suficientes para lograr que los mexicanos vivan en paz”, así como “retomar la cooperación con Estados Unidos, que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador cerró por completo al rechazar 32 millones de dólares de apoyo para invertir en seguridad nacional”. Puede ser cierto, pero es inaceptable que el embajador Ken Salazar opine o recomiende qué hacer en un tema tan sensible y que sólo compete a los mexicanos.
Con el arribo de Donald Trump a la Casa Blanca para 2025 las autoridades mexicanas tendrán que ser muy cautelosas. No endeudarse con países extranjeros es cuestión de soberanía nacional. Al recibir financiamiento de cualquier organismo financiero internacional llámese Fondo Monetario Internacional (FMI), Banco Interamericano de Desarrollo (BID) o Banco Mundial (BM) los países endeudados tienen que seguir las reglas que éstos impongan.
La industria armamentista y el financiamiento externo a países en desarrollo, forma parte de la economía estadounidense. No solo presta financiamiento a terceros países en situaciones de emergencia económica y desastres naturales, sino para financiar guerras. Mientras Joe Biden se reunía en Rio de Janeiro, Brasil en el foro del G-20 con mandatarios y representantes de 20 países para debatir en torno a la paz y la seguridad internacional, se difundía la noticia de que Ucrania había lanzado misiles de largo alcance de fabricación estadounidenses contra Rusia.
INTERVENCIÓN MILITAR DE EU
En cuestión de seguridad nacional las diferentes corrientes políticas en México tendrán que permanecer unidas, porque declaraciones como las expresadas por un embajador como Ken Salazar o un político mexicano como Marko Cortés solo crean división. No es sensato pedir ayuda a los Estados Unidos para combatir el narco.
Y si, como dijo la Presidenta de México eso es ser un traidor a la patria. Permitir la introducción de tropas norteamericanas a territorio mexicano con el pretexto de combatir el narcotráfico es intervención militar. Proponer tipificar el narcotráfico como terrorismo es darle manos libres a los Estados Unidos para hacer una guerra en México. Para Estados Unidos el terrorismo es una amenaza a la democracia y a la paz internacional como en otro tiempo fue el comunismo. En nombre del terrorismo ha intervenido países del medio oriente como Irán, Iraq, Franja de Gaza, Palestina, Líbano etc.
Por otra parte, son preocupantes las amenazas lanzadas por Donald Trump en el sentido de que ya tiene misiles de largo alcance apuntando hacia los principales objetivos de los narcotraficantes mexicanos. Confiamos en que las autoridades del nuevo gobierno tengan la capacidad para lograr erradicar la violencia en el territorio mexicano. Esa será la prueba de fuego para la Presidenta Sheinbaum con el fin de acallar las voces que dicen que es otro el que gobierna.