“Los Tequileros”, presuntos autores de masacre de Totolapan… y expertos en secuestros masivos
El grupo criminal de Los Tequileros fue encabezado por Raybel Jacobo de Almonte, alias “El Tequilero”, a quien las autoridades lo consideraban como un hombre deteriorado física y económicamente, con un grupo armado disminuido, venido a menos, pero cada vez que lo buscan los recibe a tiros.
La comunidad de La Gavia, en el municipio de San Miguel Totolapan, en la zona de Tierra Caliente, era el pueblo donde “El Tequilero” utilizaba de guarida y nadie podía penetrar.
Incluso, en una ocasión en julio de 2017, agentes de la entonces Agencia de Investigación Criminalística (AIC) de la Procuraduría General de la República (PGR) intentaron detenerlo y en el enfrentamiento murieron cuatro elementos y 11 resultaron heridos.
Jacobo de Almonte era uno de los objetivos prioritarios en el estado; sin embargo, presuntamente fue abatido en julio de 2018 en un enfrentamiento en la sierra, pero su cuerpo nunca fue hallado.
Jacobo de Almonte comenzó a pelearle el control del territorio a Jonhy Hurtado Olascoaga, “El Pez”, el líder de la “Familia Michoacana” en esa región.
“El Pez” y “El Tequilero” hasta finales de 2012 formaban parte del mismo grupo. “El Tequilero” era pistolero de “El Pez”. Incluso llegaron a compartir las ganancias del cobro de piso que hacían en la mina de Temixco, en el municipio de Arcelia.
Investigaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE) establecen que el rompimiento entre “El Pez” y “El Tequilero” fue por una traición. Un integrante de la “Familia Michoacana” secuestró y asesinó a la esposa e hijos de Raybel Jacobo de Almonte.
Pero también está la versión de que Jacobo de Almonte estuvo aliado con Vicente Popoca, “El Chente” o “El Gordo”, el líder de grupo delictivo “Guerreros Unidos” en San Miguel Totolapan. Tras la muerte de Vicente Popoca, “El Tequilero” tomó el control del grupo. De la muerte de “El Chente”, unos responsabilizan a Jacobo de Almonte.
El grupo “Los Tequileros” dejó hace unos años en claro su forma de delinquir: el secuestro, pero sobre todo el masivo.
Así operan Los Tequileros
El 10 de enero de 2016, 21 personas fueron secuestradas por un grupo armado en un camino rural en el municipio de Arcelia cuando se dirigían a la celebración de una boda. Las personas estuvieron en cautiverio durante cinco días. En el municipio se desplegó un operativo policiaco-militar y finalmente fueron liberados casi todos. El que no regresó del secuestro fue el empresario tortillero, Eutimio Tinoco, de 50 años a quien asesinaron. El secuestro se lo adjudicaron “Los Tequileros”.
Al día siguiente, el 11 de enero, en el municipio de Ajuchitlan del Progreso, un comando armado se llevó de la secundaria Técnica número 114, ubicada en la comunidad de Santana del Águila, a cinco profesores.
Por los cinco, sus familiares pasaron días recolectando dinero para pagar el rescate. El dinero se entregó, sin embargo no regresaron los cinco profesores con vida: el director de la escuela, Joaquín Real Toledo, murió en la sumisión.
El 19 de noviembre, en la comunidad de San Jerónimo, en el municipio de Ajuchitlán del Progreso –de acuerdo a la versión del gobierno del estado– unos 30 hombres armados entraron al pueblo y se llevaron a 12 personas, entre ellos dos menores de edad.
Los familiares de los secuestrados recibieron llamadas pidiendo dinero a cambio de su libertad. 10 días después fueron liberados.
El último caso ocurrió el 12 de diciembre de 2016. “Los Tequileros” secuestraron al empresario constructor, Isauro de Paz Duque. Sin embargo ahí se dio un quiebre.
Al día siguiente, el 13 de diciembre, pobladores se armaron y conformaron el grupo de autodefensa Movimiento Totolapense por la Paz (MTP), para liberar al ingeniero.
Se vinieron días de tensión. Y los pobladores le jugaron con la misma moneda: para liberar al ingeniero los pobladores retuvieron a la madre de “El Tequilero”, María Félix de Almonte y a la regidora del PRI, María del Carmen Barrera Navarro. Dos días después se dio el intercambio.
A la regidora, la FGE la detuvo porque le encontraron una lista con 32 nombre de personas que “Los Tequileros” planeaban secuestrar. Fue liberada por falta de pruebas.
Desde entonces, en San Miguel Totolapan vive a la expectativa.
En mayo de 2017, el municipio convulsionó nuevamente. El día 10, un enfrentamiento entre “Los Tequileros” y la “Familia Michoacana” provocó una revuelta. Ese día, según el reporte oficial, integrantes de la “Familia Michoacana” entraron La Gavia a capturar a Raybel Jacobo de Almonte.
“Los Tequileros” los recibieron a balazos. Por más de tres horas se trenzaron a balazos hasta que murieron ocho personas y cuatro más quedaron heridos. Los pobladores sólo reconocieron a tres de los asesinados y a los cinco restantes les prendieron lumbre.
Para el siguiente día, San Miguel Totolapan estaba completamente tomado por el grupo de autodefensa, quien no permitieron la entrada de la policía y de militares, a quienes acusaron de proteger a “Los Tequileros”.
Sin embargo, el 12 de mayo, la policía y el Ejército entraron por la fuerza a ese municipio y vino la reacción: en siete municipios por donde pasa la carretera que comunica a toda la región de la Tierra Caliente, hombres armados establecieron bloqueos. Durante más de cinco días toda esa zona estuvo incomunicada.
Por esos días, la noche del sábado 13 de mayo, siete reporteros fueron asaltados cuando regresaban de cubrir los bloqueos y en 15 minutos perdieron más de un millón de pesos en equipo y una camioneta.