Rescatan vía aérea a los primeros 20 maestros varados en la Huasteca veracruzana; continúan labores para evacuar a 20 más
Un total de 40 profesores se refugiaron en una comunidad de Ilamatlán duranta les fuertes lluvias que se presentaron en el estado
Los primeros 20 de 40 maestros que se habían refugiado desde el viernes pasado en una comunidad de la Huasteca veracruzana, donde los caminos estaban cortados por las fuertes lluvias y deslaves, finalmente fueron rescatados hoy vía aérea.
Aeronaves de la Fuerza Aérea Mexicana y del Gobierno del Estado arribaron a la comunidad de Xoxocapa del municipio de Ilamatlán, donde pudieron extraer de la zona a los primeros 20 maestros de preescolar, primaria, telesecundarias y Tebas.
Tras intensos llamados a través de videos y cartas difundidos en redes sociales, la ayuda humanitaria llegó a dicha comunidad, donde los maestros y maestras se habían refugiado en las primeras horas de la crecida de ríos y deslaves que bloquearon todos los caminos de las poblaciones donde se encontraban dando clases.
“Urge que nos puedan rescatar porque necesitamos conocer de nuestras familias y estar con ellas”, había solicitado el profesor Denis García Santos.
Durante varios días, la comunidad los acogió dándoles techo pero también alimentos; en tanto, los pobladores intentaban crear, sin
éxito, una tirolesa para unir los puntos del puente que se cayó, todo sobre el río Xoxocapa.
Los llamados de auxilio de maestros comenzaron a inundar las redes sociales desde el viernes por la tarde, cuando se habían
desbordado los principales ríos del norte de Veracruz.
Docenas de profesores se habían quedado atrapados en pueblos y comunidades de la huasteca, donde los escurrimientos de agua
provocaron deslaves, cortes de caminos rurales y puentes colapsados.
En mensajes escritos y videos caseros, no sólo imploraban para ser rescatados, sino que reportaban daños y deslaves en pueblos
serranos, hasta donde –denunciaban- no había llegado la ayuda oficial.
Las noticias de fallecimientos surgían primero como rumores esparcidos entre comunidades, pero luego se confirmaban con la aparición de cuerpos.
Y desde entonces, la frustración y enojo de un sector magisterial ha venido creciendo. Uno de los primeros cuestionamientos para las
autoridades educativas de Veracruz fueron los avisos de suspensión de clases, los cuales se fueron dando por día y a altas horas de la noche.
Al decretarse en las noches las suspensiones, docenas de maestros y maestras se veían imposibilitados de regresar a sus hogares y
se mantenían en los pueblos a los que habían sido comisionados.
Incluso el jueves se había dejado fuera de la suspensión de actividades al municipio de Poza Rica, cuya población reclamó y a altas
horas de la noche las autoridades educativas rectificaron y lo incluyeron, pero fue demasiado tarde para maestros que seguían en sus lugares de adscripción.