Vamos a ganar; los números lo dicen: Biden
Washington.— El candidato presidencial demócrata, Joe Biden, amplió ayer su ventaja en estados clave que definirán al ganador de las presidenciales del 3 de noviembre. Sin embargo, ninguno de ellos ha sido declarado a su favor, por lo que evitó hacer alguna declaración triunfalista.
Por la noche, declaró: “No tenemos una declaración final de victoria todavía, pero los números nos cuentan una historia convincente y clara: Vamos a ganar esta carrera”. Reconoció que el proceso “ha sido muy lento”, pero subrayó que “no estamos hablando de números; estamos hablando de votos”. Por eso, apeló a la paciencia. Y a la unidad nacional.
Escrutados 96% de las boletas en Pennsylvania, Biden se imponía, a las 22:00 horas, al presidente Donald Trump por casi 29 mil sufragios (49.6% contra 49.1%), ampliando la diferencia tras haberle dado un vuelco por la mañana. El sitio web de la Secretaría del estado señaló que aún deben contabilizarse más de 102 mil 541 votos por correo, muchos de ellos en el condado de Allegheny, un área demócrata en la que se ubica Pittsburgh, y en el bastión demócrata del condado de Philadelphia.
Sin embargo, el Tribunal Supremo de Estados Unidos aceptó una demanda interpuesta por los republicanos con carácter de urgencia y ordenó a Pennsylvania separar los votos que llegaron después de la jornada electoral del 3 de noviembre, algo que ya contemplan los protocolos del estado.
El objetivo final republicano es que esos votos sean declarados nulos, un proceso que se litiga en una demanda paralela.
También en Nevada se amplió la ventaja del candidato demócrata, donde anoche tenía 49.8% contra 48% de Trump, una diferencia de 22 mil 657, escrutados 93% de los sufragios. En Georgia, donde ningún demócrata ha ganado desde 1992, pero donde Biden logró ya dar la vuelta y ahora aventaja, se informó que habrá un recuento de los votos, que marca la ley si la diferencia es demasiado cerrada. Con 98% de boletas escrutadas, el exvicepresidente acumulaba a su favor 49.4%, contra 49.4% del actual mandatario. La diferencia es de 4 mil 289 sufragios.
En Arizona, la brecha que da ventaja a Biden se ha ido achicando, aunque aun así la agencia AP mantiene este estado declarado a favor del demócrata. Con 97% de votos contados, 49.6% son para él y 48.7% para Trump. La diferencia es de 29 mil 861 votos. Contando Arizona, Biden tiene ya 264 votos electorales de los 270 que necesita para ganar. Sin contar Arizona, la cifra baja a 253.
Si se confirma la tendencia en Pennsylvania, los 20 votos electorales que proporciona el estado darían el triunfo al demócrata, incluso si Trump le diera la vuelta y se impusiera en Arizona. Si no, Biden necesitaría ganar en Nevada y Georgia para imponerse aun sin Arizona y Pennsylvania.
Trump tiene que ganar todos los estados que faltan —menos Alaska, que tiene tres votos electorales— para poder lograr la cifra de 270. Por ahora tiene 214.
La campaña del mandatario asegura que la elección “no ha terminado”. Él se ha encomendado a la vía legal como opción para mantenerse en el poder otros cuatro años. “Seguiremos en este proceso a través de todos los aspectos de la ley (…). Nunca dejaré de luchar por ustedes y por nuestro país”, dijo en un comunicado.
El ánimo en su equipo parece haberse desinflado. “A no ser que haya un caso importante de fraude electoral o algo drástico, esto se ha acabado, y se acabó hace un día. La mayoría de la gente lo sabe”, dijo un alto cargo de la campaña de Trump, que pidió el anonimato, al portal Politico.
Pero Trump no está dispuesto a conceder y sigue alimentando, sin fundamentos, la idea de que le están robando la elección.
“Funcionarios de todos los niveles, incluyendo en el Congreso, necesitan decirle al presidente: ‘Señor, necesita tener la misma paciencia que el resto del país’”, manifestó el almirante de la Marina en el retiro Steve Abbot, quien se desempeñó como asesor adjunto de seguridad nacional en el gobierno de George W. Bush.
Las autoridades electorales piden paciencia, dado el volumen elevado de votos anticipados que, en general, se están contando al final, alentando el proceso.
Al mismo tiempo, preocupado por la posibilidad de que Biden saliera a declararse ganador, Trump advirtió: “Joe Biden no debería declarar la victoria para la presidencia de forma errónea. Yo también podría reivindicarla. ¡Los procedimientos judiciales apenas empiezan!”. El mensaje resulta irónico, dado que él ya se ha declarado, sin bases, ganador.