Trump dice que el “dolor” causado por los aranceles “valdrá la pena” para EU
La orden de Trump incluye un mecanismo para aumentar las tarifas cobradas por Estados Unidos contra las represalias de los otros países
El presidente estadounidense Donald Trump respondió que el dolor por los aranceles «vale la pena» mientras Canadá y México toman represalias.
El mandatario dijo que varios países, entre ellos México, Canadá y China, «continúan con la estafa que lleva décadas sufriendo Estados Unidos, tanto en lo que respecta al comercio, como al crimen y a las drogas que pueden fluir tan libremente a Estados Unidos».
«Esos días ya han pasado», escribió en Truth Social.
Indicó que los productos deberían fabricarse en Estados Unidos y que su país no debería perder «billones de dólares en subsidios a otros países».
«¿Habrá dolor? Sí, puede ser, puede ser que no. Todo valdrá la pena por el precio que hay que pagar», afirmó.
En otro mensaje atacó a Canadá y dijo que debería «convertirse en nuestro querido estado número 51. Impuestos mucho más bajos y una protección militar mucho mejor para el pueblo de Canadá… ¡Y sin aranceles!».
«No necesitamos nada de lo que ellos tienen. Tenemos energía ilimitada, deberíamos fabricar nuestros propios automóviles y tenemos más madera de la que jamás podremos utilizar. Sin este subsidio masivo, Canadá deja de existir como país viable».
El presidente republicano publicó en las redes sociales el sábado que los aranceles eran necesarios “para proteger a los estadounidenses”, presionando a las tres naciones a hacer más para frenar la fabricación y exportación ilícita defentanilo y a que Canadá y México reduzcan la inmigración no autorizada a Estados Unidos.
Trump declaró una emergencia económica para imponer aranceles del 10% sobre todas las importaciones procedentes de China y del 25% a las importaciones procedentes de México y Canadá. Sin embargo, colocó un arancel del 10% sobre la energía importada por Canadá, como el petróleo, gas natural y electricidad.
La acción provocó un enfrentamiento económico con los dos mayores socios comerciales de Estados Unidos, México y Canadá, poniendo fin a una relación comercial de décadas con la posibilidad de duras represalias por parte de esas dos naciones.
La presidenta de México ordenó inmediatamente aranceles de represalia y el primer ministro de Canadá dijo que el país aplicará aranceles equivalentes del 25% a hasta 155 mil millones de dólares en importaciones estadounidenses.
La orden de Trump incluye un mecanismo para aumentar las tarifas cobradas por Estados Unidos contra las represalias de los otros países, lo que plantea el espectro de una perturbación económica aún más grave.
Canadá y México responden con aranceles
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, dijo el sábado que los aranceles canadienses sobre 30 mil millones de dólares en comercio de alcohol y frutas estadounidenses entrarán en vigor el martes, cuando se apliquen los aranceles estadounidenses. Abrió su discurso a los canadienses con un mensaje dirigido a los consumidores estadounidenses.
“Tendrá consecuencias reales para ustedes, el pueblo estadounidense”, dijo, añadiendo que la medida generará alzas de precios de alimentos y otros productos.
Trudeau canalizó las opiniones de muchos canadienses que se sentían traicionados por su vecino y aliado de larga data, recordando a los estadounidenses que las tropas canadienses lucharon junto a ellos en Afganistán y los ayudaron a responder a innumerables crisis, desde los incendios forestales en California hasta el huracán Katrina.
“Las medidas tomadas hoy por la Casa Blanca nos dividen en lugar de unirnos”, dijo Trudeau, advirtiendo en francés que podrían provocar “tiempos oscuros” para muchas personas. Alentó a los canadienses a “elegir productos y servicios canadienses en lugar de los estadounidenses”.
En tanto, la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, anunció en una publicación en la red social X que instruyó a su secretario de Economía que implemente una respuesta que incluye “medidas arancelarias y no arancelarias” en defensa de los intereses de México.
“Rechazamos categóricamente la calumnia que hace la Casa Blanca al gobierno de México de tener alianzas con organizaciones criminales, así como cualquier intención injerencista en nuestro territorio”, escribió Sheinbaum.
“Si el gobierno de Estados Unidos y sus agencias quisieran atender el grave consumo de fentanilo en su país, pueden por ejemplo combatir la venta de estupefacientes en las calles de sus principales ciudades, lo que no hacen y el lavado de dinero que se genera por esta actividad ilegal que tanto daño ha hecho a su población”, añade la publicación.
Mientras tanto, el primer ministro de la provincia canadiense de Columbia Británica, David Eby, pidió a los residentes que dejaran de comprar licores de los estados con gobiernos republicanos en Estados Unidos y anunció que eliminaría las marcas de alcohol estadounidenses de los estantes de las tiendas gubernamentales como respuesta a los aranceles.
China tomará contramedidas para defender derechos e intereses legítimos
El ministerio chino de Exteriores dijo que el gobierno de su país “deplora firmemente y se opone a esta medida y tomará las contramedidas necesarias para defender sus derechos e intereses legítimos”.
China comenzó a regular los medicamentos relacionados con el fentanilo como sustancias controladas en 2019 y mantuvo “cooperación contra narcóticos con Estados Unidos”, indicó el ministerio, que pidió al gobierno estadounidense que corrigiera lo que consideraba medidas injustas.
Por su parte, el Ministerio chino de Comercio dijo que presentaría una demanda ante la Organización Mundial de Comercio por la “prácticas injustas de Estados Unidos” y tomaría medidas para salvaguardar sus derechos e intereses.
Los aranceles entrarán en vigor el martes, lo que posiblemente generará un enfrentamiento en América del Norte que podría sabotear el crecimiento económico. Un nuevo análisis del Laboratorio de Presupuestos de Yale expuso el posible daño a la economía de Estados Unidos e indicó que el hogar estadounidense promedio perderá el equivalente a mil 170 dólares en ingresos por los gravámenes. El crecimiento económico se desacelerará y la inflación empeorará, y la situación podría ser peor si Canadá, México y China toman represalias.
Un funcionario de alto rango del gobierno estadounidense, que insistió mantener el anonimato para informar a los periodistas, dijo que el arancel más bajo sobre la energía reflejaba el deseo de minimizar cualquier aumento disruptivo en el precio de la gasolina o los servicios públicos. Eso es una señal de que los funcionarios de la Casa Blanca entendieron el riesgo que corren respecto a la inflación. Las alzas de precios bajo el gobierno del expresidente Joe Biden provocaron frustración entre el electorado, algo que ayudó a Trump a ganar las elecciones presidenciales del año pasado.
La orden firmada por Trump no contenía ningún mecanismo para otorgar exenciones, señaló el funcionario, un posible impacto negativo para los constructores de viviendas que dependen de la madera canadiense, así como para agricultores, fabricantes de automóviles y otras industrias.
El gobierno de Trump impuso los aranceles como una medida para obligar a los tres países a frenar la propagación y fabricación de fentanilo, además de presionar a Canadá y México para limitar cualquier inmigración ilegal hacia Estados Unidos.