Se alistan los últimos detalles para el regreso de Cruz Azul al estadio Ciudad de los Deportes
Desde mañana, el estadio de la Ciudad de los Deportes comenzará un maratón de futbol, al ser casa de Cruz Azul, América y Atlante. El Azteca estará en remodelación
A partir del Clausura 2024, el centro neurálgico del futbol mexicano dejará de ser el Estadio Azteca, que comenzará su remodelación de cara al Mundial 2026. El inmueble de la Ciudad de los Deportes retomará su antiguo protagonismo.
El estadio de la colonia Nochebuena, la casa de los Potros de Hierro del Atlante en el Ascenso MX, ahora será también donde el América y el Cruz Azul jueguen sus partidos como local. Esto no es nuevo. En alguna ocasión de su larga historia, tanto Águilas como cementeros vieron al Azulgrana como su casa principal, pero en esta ocasión la necesidad los obliga.
El Cruz Azul jugará en este semestre, como mínimo, nueve partidos como local en el Azulgrana. El América disputará sólo siete, aunque es posible que sus dos primeros sean en el Azteca. El Atlante también disputará siete.
Sin contar la Liguilla.
Los tres clubes deberán desarrollar una logística muy especial para sentirse en casa, que está siendo remodelada para el compromiso que se le viene.
Hasta el momento, las tribunas del estadio seguirán pintadas con los colores azul y grana, los del Atlante. Todas las áreas comunes serán quitapón. Los logotipos en los vestuarios se cambiarán según el equipo que actúe como local. Los trabajadores del estadio deberán hacer una labor titánica para acondicionarlo rápido.
La publicidad que se ponga alrededor de la cancha y en las tribunas correrá la misma suerte: Se cambiará según el equipo que funja como anfitrión.
La banca de local será la misma para los tres equipos, pero los asientos tendrán color neutro.
En cuestión de palcos, cada directiva tendrá sus lugares asignados. Serán alrededor de siete, y serán privados.
En el caso de los aficionados que hayan comprado un palco para el torneo, este no será del todo exclusivo. Al terminar el juego de su equipo, deberán dejarlo limpio, para que otro fanático de un equipo distinto lo utilice.
Así será por dos años.