Vuelo atlético a los olímpicos de Tokio

Vuelo atlético a los olímpicos de Tokio

Después de ganar oro en los 5,000 m de los Juegos Panamericanos en Lima 2019, Laura Galván imaginaba su debut en las carreras de ruta, pero su entrenador, Cecilio Blancarte, le pidió darle una segunda oportunidad a la pista, y en este 2020, a sus 28 años de edad, ha roto dos récords mexicanos que le indican lo alcanzable que es la meta de clasificar a sus primeros Juegos Olímpicos.

“Yo ya me hacía corriendo medios maratones y maratones, y mi entrenador me dijo que todavía tenía mucho que dar y qué hacer en la pista. Estoy tan sorprendida, tan contenta y tan impresionada por todo lo que estoy logrando, que siento que este año, con todo el entrenamiento y esta preparación, me está llevando a conocer que no hay límites. Siento que seguirá esta inercia de aquí a Juegos Olímpicos”, comentó Laura Esther.

En los albores de 2020, Galván rompió el récord mexicano de la milla con tiempo de 4m:31.89s (4m:39.58s, que pertenecía a Brenda Martínez, el 14 de marzo de 2009), y dos semanas después el de los 3,000 m con un registro de 8m:49.74s (8m:53.53 s que logró Adriana Fernández en pista abierta el 25 de junio de 2000), en eventos bajo techo que sirven como preparación hacia la campaña abierta.

“Nunca pensé correr debajo de 9 minutos en un 3,000 m, en un ritmo tan fuerte; la verdad hasta corro emocionada de estar en eventos que antes veía en la tele, y no sólo participo, sino que además las marcas son buenas. Todo se da a tu favor cuando disfrutas todo el proceso”, aseguró la fondista.

Después de Adriana Fernández, Madaí Pérez o Brenda Flores, la estafeta del atletismo de fondo femenil de México la tomaron Úrsula Sánchez (oro en 10,000 m de Barranquilla 2018), Risper Gesabwa (plata en 10,000 m de Lima 2019), y Laura Galván (oro en 5,000 en Lima 2019).

Sin embargo, Sánchez y Gesabwa ya migraron al maratón y Laura le dio una segunda oportunidad a los estadios de atletismo.

“Mi entrenador me ha llevado a conocer límites que ni imaginaba. Estoy contenta y con mucha confianza de que sí se puede, de seguir enfocada en mi trabajo, en una buena alimentación, en descansar bien; sé que puedo ir a Olímpicos. No voy a soltar este sueño”, aseguró la competidora nacida en La Sauceda, Guanajuato.

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