Manuel Ojeda el actor que estuvo ligado a la historia de México
El actor pudo intepretar a Porfirio Díaz y a Emiliano Zapata en su larga carrera artística.
Porfirio Díaz y Emiliano Zapata fueron de carne y hueso reciente gracias a Manuel Ojeda, el actor que le dio vida a estos personajes históricos en las series “Senda de Gloria” y “El vuelo del águila”, respectivamente.
Pero también estuvo en Lecumberri con “El Apando”, mostrando lo terrible de la vida carcelaria o y fue parte de Santa Martha con “La cuarta compañía”, cinta que recreó al grupo de reos que eran liberados en la noche para robar autos y regresar al día siguiente
Ojeda, el bajacaliforniano que trabajó en más de 250 cintas, varias telenovelas y series, falleció esta mañana a la edad de 81 años, dejando un importante vacío en el mundo del espectáculo.
Era alguien a quien le fascinaba estar frente a cámara, pero de haber podido, la escritura de historia era su sueño.
“Se me daba la imaginación, pero no la prosa. Al momento de desarrollar, no podía”, dijo en una entrevista IERTBCS.
De extracción proletaria, como él mismo se definía, gustaba caminar por las playas solitarias, juntar caracoles y ponerles nombres.
«Llegué a tener casi 200, creo eso me ayudó a ejercitar mi memoria», contaba.
“El apando”, que le dio su primer Ariel y una versión de “Pedro Páramo”, entonces la película más costosa del cine nacional, fueron dos de sus cintas favoritas por lo que significaron en su vida.
Pero fue Alfonso Arau en “Calzontzin inspector”, hecha a principios de los 70, que lo hizo entrar a la pantalla grande.
Un amigo lo envió en su lugar para hacer del doble del realizador escena, pero jamás había hecho cine y tampoco sabía de mímica.
«Pues qué remedio, ya no tengo tiempo, estás flaco y prieto, me puedes ayudar a ensayar», le dijo el realizador.
“Canoa”, con Felipe Cazals; “Mi querido Tom Mix”; “El infierno de todos tan temido” y “Salón México” forman parte de su filmografía.
Comenzó a hacer televisión, la cual le gustó hasta que le tocó encarnar a Porfirio Díaz, en “El vuelo del águila”. En la misma se ve al presidente mexicano en su etapa agonizante, siendo su muerte de las escenas más memorables en su memoria.
Ojeda llegó a confesar que no sabía si quería ser actor, porque la timidez fue parte de su sello en sus primeros años de vida, pero sí le gustaba leer muchas cosas de cine.
Varias veces se llegó a pasear por una escuela donde daban cursos de actuación, con la intención de conocer. Un día, alguien le dijo que había faltado el actor de una obra y lo llevaron de la mano con el responsable que le dio a leer un diálogo. Horas después, ya estaba arriba del escenario.»Y ya no lo solté», recordaba.
“Verano de amor”, “Mujeres asesinas” y “Tormenta en el paraíso” lo vieron pasar en su elenco. “Quererlo todo” y “Corazón guerrero” fueron sus últimas apariciones en tv.