Justicia para la niña de “calcetitas rojas”; madre y padrastro reciben 88 años de cárcel por su homicidio
Después de un largo proceso la madre y el padrastro de Lupita, “la niña de las calcetas rojas” fueron sentenciados a 88 años de cárcel por el homicidio de la menor.
La niña, que tenía entre tres y cinco años de edad fue golpeada hasta causarle la muerte por los dos adultos. Su cuerpo fue abandonado en calles del municipio Nezahualcóyotl del Estado de México.
Los agresores fueron detenidos después de nueve meses de haber localizado el cadáver de la niña quien padecía síndrome de maltrato infantil, pues era constantemente golpeada, incluso recibió una golpiza un día antes de ser asesinada.
Un juez de distrito de ese municipio dictó la sentencia, pues consideró que existen elementos para considerar que Pablo “N” y Yadira “N” son responsables de la muerte de la niña, ocurrida en marzo del 2017.
Dan identidad a “la niña de las calcetitas rojas”
El juez ordenó que la niña asesinada brutalmente en el 2017 fuera registrada como Guadalupe Mediana Pichardo, ya que sus padres nunca acudieron al Registro Civil para darle un nombre.
Un crimen atroz
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México presento pruebas que acreditan que Pablo y Yadira causaron la muerte de Lupita el 18 de marzo del 2017.
Un accidente que le ocurre a cualquier menor de edad desató su iría, pues la pequeña se orinó en la cama mientras dormía.
Ese hecho fue suficiente para que su madre la golpeara con brutalidad en múltiples ocasiones, después su padrastro la violó y jaloneó de las piernas para azotarla contra el suelo, golpe que le causó la muerte.
Tras el homicidio envolvieron el cadáver de la pequeña en una cobija; para no ser inculpados por el crimen se trasladaron de su colonia Agua Azul a la avenida Bordo de Xochiaca donde abandonaron el cuerpo.
Cuando fue localizado el cuerpo de Lupita estaba vestida con un pantalón rosa, unas sudadera verde y unas calcetitas rojas.
El crimen causó conmoción entre la sociedad mexicana, por lo que rápidamente fue identificada como “la niña de las calcetitas rojas”.
Nadie acudió a identificar el cadáver de Lupita, por lo que su cuerpo fue sepultado por elementos de la Fiscalía en un panteón de Naucalpan con el nombre de “Angelita”.
Hoy por fin, recibe justicia, pues su madre y padrastro recibieron sentencia de 88 años de prisión para uno de los crímenes más atroces cometidos contra una menor de edad.
