La Iglesia Católica permite la cremación de restos humanos, pero pide depositarlos en el panteón
- Rechaza que se guarden en la casa, se esparzan en algún lugar o se hagan joyas con los restos
La cremación de restos humanos es algo permisible por la iglesia católica que además pide que estas cenizas no se conserven en la casa, sino en un lugar sagrado, como un cementerio.
La Iglesia católica dio a conocer que es permisible la cremación de los restos humanos, pero pide a las personas que estos restos se mantengan en un lugar de oración y no en las casas como algunas personas lo han hecho.
Las cenizas de los difuntos católicos tampoco se pueden esparcir, ni dividir, ni mucho menos crear joyas a partir de ellas.
«La Iglesia recomienda insistentemente que los cuerpos de los difuntos sean sepultados en cementerios u otros lugares sagrados». Estas son parte de las nuevas instrucciones que la Congregación para la Doctrina de la Fe, el órgano del Vaticano que se encarga de regir sobre la doctrina de la fe ha referido.
La Iglesia no se opone a la cremación por razones «higiénicas, económicas o sociales», pero el nuevo documento marca el cambio más grande a su instrucción Piam et constantem de 1963, cuando las cremaciones fueron autorizadas por primera vez.
«Las cenizas del difunto, por regla general, deben mantenerse en un lugar sagrado, es decir, en el cementerio o, si es el caso, en una iglesia», o en algún lugar con «jurisdicción» eclesiástica, ordenan las instrucciones Ad resurgendum cum Christo.
«No sea permitida la dispersión de las cenizas en el aire, en la tierra o en el agua o en cualquier otra forma, o la conversión de las cenizas en recuerdos conmemorativos, en piezas de joyería o en otros artículos».
Algunas joyerías ofrecen servicios para convertir las cenizas de un difunto en una piedra brillante o varios tipos de adornos, lo cual es contrario a la nueva doctrina católica. De esta manera, la Diócesis de San José invita a los católicos a llevar las cenizas de sus difuntos a los cementerios y/o iglesias.