
“Guerra de los 12 días”
La madrugada del 20 y 21 de junio el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump hizo atacar sin la aprobación del Congreso estadounidense tres enclaves nucleares en Irán: Fordo, Natanz e Isfahan.
La región fue devastada luego de atacarla “con la madre de todas las bombas”. La bomba anti búnkeres o penetrador masivo de municiones (MOP) GBU.57A/7B que pesa 13,600 kilos y tiene la capacidad de penetrar hasta 18 metros de hormigón o 61 metros de tierra antes de explotar. El incidente hizo estremecer la corteza del suelo iraní que produjo un sismo de 5.5 grados Richter al noreste del país.
Durante una conferencia de prensa efectuada el 22 de junio Trump anunció: “no hay ejército en el mundo que pueda hacer los que hicimos esta noche”; además se congratuló de haber destruido los centros de investigación nuclear iraní, calificando su acción como “muy exitosa”. El argumento del ataque que inició Israel el 13 de junio fue para destruir el programa nuclear iraní.
Durante este hecho murieron 4 científicos responsables del programa nuclear, así como 5 líderes militares entre ellos el Jefe de la Guardia Revolucionaria, Hussein Salami. La respuesta por parte del gobierno de Irán no se hizo esperar, quien contraatacó al enemigo en una guerra que se prolongó por 12 días y donde el Parlamento Iraní aprobó una serie de decisiones como cerrar el estrecho de Ormuz, lugar por donde transita una cuarta parte del petróleo a nivel mundial.
Además, Ali Akbar Velayati, Asesor del Ayatola Ali Jamenei amenazó con atacar las bases militares de Estados Unidos en medio oriente. Decisión que se llevó a cabo el lunes 23 cuando Irán atacó Udeid en Qatar con 14 misiles que no lograron su objetivo.
Cabe decir que La base militar Al Udeid sirve de cuartel general al Comando Central de Estados Unidos en el medio oriente y alberga hasta 10.000 elementos castrenses. Horas antes del ataque iraní, Israel bombardeo centros de mando de la Guardia Revolucionaria y la prisión Evin en Teherán.
INNUMERABLES MUERTES
Para el 23 de junio Trump anunció que “la guerra de los 12 días” entre Irán e Israel, estaba concluida. Sin embargo los ataques entre ambas naciones dejaron un saldo de más de 400 muertos y 3 mil heridos en Irán, la mayoría civiles; en tanto que en Israel las bajas solo fueron de 24 personas. El 2 de julio el Ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abbas Araqchi confirmó que las instalaciones nucleares sufrieron importantes daños en Fordo luego de los bombardeos de los Estados Unidos efectuados el domingo 22 de junio.
En consecuencia el Presidente de Irán suspendió toda cooperación con el Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA), medida que tiende a impedir que los inspectores de la OIEA entren a Irán, “sino se garantiza la seguridad de las instalaciones nucleares de Irán”.
El gobierno iraní también denunció ante la ONU que durante los últimos 20 años que han desarrollado proyectos de investigación sobre el uranio enriquecido han sufrido sanciones y sabotaje a sus instalaciones por parte de Estados Unidos e Israel, culminando con el asesinato de 4 científicos.
En respuesta a esta denuncia Rafael Grossi, Director General de la OIEA expresó que Estados Unidos atacó las instalaciones nucleares de Irán porque días previos a esta acción Teherán trasladó unos 400 kilos de uranio enriquecido al 60%, cantidad suficiente para fabricar 7 u 8 bombas nucleares.
LA CONVENIENCIA DE EU
¿Realmente a Estados Unidos le preocupa que las naciones vivan en santa paz? No, lo que si le preocupa es que otras naciones desarrollen armas más potentes que él, por eso sabotea las investigaciones sobre uranio enriquecido.
El uranio es un elemento químico altamente radiactivo que se encuentra de manera abundante en la naturaleza, incluso lo tenemos en el cuerpo humano. Los océanos contienen unos 4000 millones de toneladas de uranio diluido. Sin embargo, para darle un uso industrial o atómico tiene que enriquecerse o pasar por un proceso químico lento y costoso.
Por su gran potencial energético la OIEA y 6 potencias más firmaron en 2015 un acuerdo que limita a 300 kilogramos la cantidad de uranio y su enriquecimiento al 3.67%.
El uranio enriquecido al 3% o 5% sirve para generar electricidad, pero al superar el 20% se considera peligroso por la gran cantidad de energía que posee. En promedio se necesitan entre 4 y 5 kilos de uranio enriquecido para mover un buque mediante propulsión nuclear por 30 años sin que tenga que recargarse. Alcanzar el 60% de pureza como Irán es suficiente para fabricar armamento nuclear. Bastan 25 kilos de uranio enriquecido para fabricar una bomba nuclear.
Los trabajos para desintegrar el átomo comenzaron durante la segunda guerra mundial. La fisión nuclear fue descubierta en Berlín, Alemania por Otto Hahn y Fritz Strassmann, quienes dividieron el átomo.
Nueve son los países que trabajan el enriquecimiento de uranio. Estados Unidos y Rusia lideran la lista de países con más cantidad de uranio enriquecido, seguidos de Francia, Reino Unido, Pakistán, India, China, Corea del Norte e Israel.
