Las víctimas de Tlahuelilpan no eran huachicoleros; afirman familiares
* Aseguran que la gente acudió por curiosidad y por carestía del combustible
La muerte de 137 personas en la explosión del 18 de enero de 2019 “en Tlahuelilpan” fue originada por la curiosidad y la carestía de combustibles que había en ese momento, los fallecidos no eran personas malas o huachicoleras, sino gente a la que le ganó la curiosidad, opinaron deudos de la deflagración.
En entrevista, María de Jesús Pacheco Mota, quien, en el estallido, perdió a su hijo Adrián Dorantes Pacheco de 17 años y a su cuñado, Julio César López Pérez, dijo que, alrededor de estos 3 años ha escuchado que la sociedad se expresa de la peor forma de quienes murieron en la zona cero, a pesar de que no conocen la verdadera circunstancia que se dio.
“La gente que se calcinó no se dedicaba a eso (huachicoleo), sino que eran padres, madres, sobrinos, hermanos, gente común y corriente, que fue impulsada a acudir a la zona cero por la crisis de gasolina que se daba en esos días”.
En ese contexto dijo que, a veces, comentaba con su finado esposo, por qué su hijo acudió al lugar, si no tenía ni automóvil ni motocicleta como para querer hacerse de la gasolina, además de que no tenía carencias económicas ni le faltaba nada en su hogar.
Su cuñado, amplió, era un hombre trabajador, que laboraba en el negocio familiar, de gasero, y que a su muerte dejó en la orfandad a dos niños, uno de dos y uno de cuatro años… nada tenían qué hacer nuestros seres queridos ahí, “les ganó la curiosidad de andar en la bola”.
En la percepción de Pacheco Mota, coincidió Rosalina Reyes Torres, madre de un sobreviviente del estallido, Alan Hernández Reyes, de 18 años, y quien, sin embargo, el “Viernes Negro” sí perdió a su sobrino de 15 años.
La mujer señaló que, a pesar de lo que se dice, quienes murieron en el incendio no eran huachicoleros, sino gente de bien, personas trabajadoras, padres, madres, amas de casa, primos, sobrinos, ningún hombre o mujer dedicada al robo de hidrocarburo.
Lamentó el escarnio social que han sufrido las familias de quienes perecieron ahí y de los dos sobrevivientes, sin embargo, señaló que no les desea mal a pesar de ello.
