María Teresa Rodríguez (1923 – 2013) Virtuosa del Piano

María Teresa Rodríguez (1923 – 2013) Virtuosa del Piano

Si la Secretaría de Cultura del Estado de Hidalgo hubiera hecho un concurso para consagrar el 2023 al mejor intelectual con motivo de su nacimiento y los postulantes fueran por un lado el escritor de Tulancingo Ricardo Garibay y por otro la pianista María Teresa Rodríguez (Matesa para sus amigos) el resultado habría sido un empate, pues ambos son pilares de la cultura nacional y mundial.

Finalmente el 2023 se dedicó a Ricardo Garibay, enhorabuena; pero la Secretaría estará en deuda con  María Teresa Rodríguez una de las mejores intérpretes de música de concierto del siglo XX.

María Teresa Rodríguez nació el 18 de febrero de 1923 en “La bella airosa” Pachuca, ciudad capital del estado de Hidalgo.

Sus padres fueron Rosendo Rodríguez y su madre María Luisa Rodríguez. Siendo hija de una familia de músicos muy pronto desarrollo el gusto por este arte. Su padre fue cantante barítono y su madre fue hija del compositor Mariano F. Rodríguez y la pianista Otilia Arroyo. 

Al igual que Mozart fue una niña prodigio pues a los 8 años de edad (29 de agosto de 1931) dio su primer recital de piano interpretando a los mejores autores de la música de concierto como Bach, Mozart, Debussy y Beethoven.

En sus inicios tomo clases en la Ciudad de México con el Maestro Antonio Gomezanda. Que a su vez fue discípulo de Manuel M. Ponce y éste de Julián Carrillo en el Conservatorio Nacional de Música.

Durante la década de los treinta y cuarenta María Teresa fue escuchada y elogiada por pianistas de fama mundial como Ignaz Friedman, Arthur Rubinstein y Claudio Arrau, quienes realizaron diversos conciertos en México.

Su enorme talento le permitió interpretar expresiones artísticas de todas las épocas, lo mismo romanticismo, neoclasicismo que modernismo.

Entre 1945 al 1948 obtuvo una beca de la Cooperativa Cruz Azul para continuar sus estudios con el pianista ruso Alexander Borovsky, quien la consideraba su alumna predilecta.

Durante su estancia en los Estados Unidos realizó diversas presentaciones en teatros como The Town Hall de Nueva York, en Boston Massachusetts tocó como solista con la Boston Symphony bajo la batuta de Arthur Fiedler.

En la Ciudad de México fue intérprete de destacados compositores mexicanos como Manuel M. Ponce, Julián Carrillo y Claudio Arrau y Rodolfo Halffer.

Fue la primera mujer en dirigir el Conservatorio Nacional de Música.

En 1950 presento un concierto en el Palacio de Bellas Artes con la Orquesta Sinfónica Nacional bajo la batuta de Pablo Moncayo.

Entre 1952 y 1953 fue becada a Europa por el Instituto Nacional de Bellas Artes para perfeccionar su técnica pianística y dar recitales. Así fue que ofreció conciertos en Londres en la Royal Society of British Artists y en el Wigmore Hall.

En 1955 contrajo nupcias con el doctor Trifon de la Sierra Ramírez con quien procreó un hijo Tonatiuh de la Sierra Rodríguez que también es pianista. 

En 1965 se presentó como solista con la Filarmónica de Moscú.

En 1967 toco bajo la dirección de Eduardo Mata música de Bela Bartok.

En 1969 toco un recital para violín y piano con Yuriko Kuronuma en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.

Fue invitada varias veces para participar como jurado en concursos internacionales en Polonia, Montevideo y Estados Unidos.

A lo largo de su exitosa carrera se hizo acreedora de diversos premios. En 2006 el Instituto Nacional de Bellas Artes le otorgó una medalla de oro. En 2008 recibió el premio Nacional de Ciencias y Artes. Y en 2009 recibió el Premio a la Trayectoria y Mérito Artístico del Estado de Hidalgo.

Fue docente en el Conservatorio Nacional de Música y conferencista en múltiples ocasiones.

Afortunadamente su legado musical se encuentra resguardado en la Fonoteca Nacional. 

Murió en la Ciudad de México el 4 de septiembre de 2013 a la edad de noventa años.

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